El aceite de Argán es conocido desde la antigüedad  por los bereberes como el oro líquido de la piel. Ya era utilizado por las mujeres marroquíes durante muchos años para combatir los signos del envejecimiento.

Contiene un 80% de ácidos grasos esenciales, además de una elevada cantidad de vitamina E, por lo que es idóneo para la prevención de arrugas.

Además  aporta elasticidad a la piel, e incluso es eficaz para tratar las irritaciones cutáneas, tales como estrías o marcas del acné.

El aceite de argán está recomendado para todo tipo de pieles, incluso aquellas que tienen la piel grasa, mixta o con problemas cutáneos.

Es un aceite que no obstruye los poros y que penetra con gran facilidad en la piel.

Tiene propiedades antioxidantes que previenen el envejecimiento prematuro, además de hidratar, nutrir y regenerar la piel.

Cuidado de la Piel

Es aconsejable comenzar utilizando una pequeña cantidad de aceite de argán por la noche, para que la piel se vaya adaptando y nos vaya indicando el nivel de hidratación que realmente necesitamos.

Con la piel limpia aplicamos dos gotas de aceite de argán y masajeamos suavemente, dejando secar al aire durante unos minutos.

También es muy eficaz para eliminar las pequeñas grietas que a veces aparecen en los labios.

Muy importante no aplicar antes de tomar el sol ni durante la exposición solar.

Cuidado de las Uñas

Para hidratar y fortalecer las uñas y las cutículas, sumergir en una mezcla de zumo de limón y aceite de argán a partes iguales durante 15 minutos.

Afeitado

El aceite de argán aplicado antes de la espuma o gel de afeitar crea una película protectora que evita las irritaciones, cortes y rozaduras propias del afeitado.

Hidrata, suaviza, calma y protege la piel diariamente

Cuerpo

Un masaje con aceite de argán sobre la piel después de una ducha o baño dejará su piel hidratada y con una gran elasticidad.

También es perfecto para evitar las estrías.

Cabello

El aceite de argán además lo podemos utilizar como acondicionador o mascarilla para el cabello.

Aplicando unas gotas en la palma de la mano y masajeando sobre el pelo y el cuero cabelludo. Lavar con un champú suave y repetir una o dos veces por semana. Con este proceso tan sencillo conseguimos un pelo suave, sano y brillante.

Para cabellos secos, dejar actuar el aceite una media hora, y si hablamos de cabellos muy secos dejar durante toda la noche. Después de aplicar podemos envolver el cabello con un turbante o toalla por lo que el tiempo de espera es más corto.

Manos

Aplicar una pequeña cantidad de aceite de argán en manos y cutículas antes de acostarse.

Esto fortalece las uñas débiles o quebradizas, combate las manchas de la piel y mantiene las manos suaves y tersas.

Como podéis ver tenemos a nuestro alcance un producto que nos aporta numerosos beneficios y que por algo era conocido desde la antigüedad como el Oro Líquido de la Piel.